Soltera a los 40. Dedicada a los del UDYCO (novela de autoayuda)

Soy Tania, y realmente tengo 42 años. Creía en los cuentos de hadas, luego no, y ahora otra vez. Mejor los de adultos con sexo, por supuesto, y las películas de estética de mi gusto, porque aunque quedé feo decirlo, la realidad en un día a dia es así. Mi favorito es el de 50 sombras, pero me sobra x sadomasoquismo y me falla que el no tenga la carrera universitaria completa. Tuve varios novios muy guapos, pero muy infieles, rebeldes y de estilo diferente. Cuando encontré el ideal, se fue con otra más rica y guapa. Manuve una relación para mí muy negativa y tóxica que me hizo cambiar de visión, así como varias relaciones sexuales puramente de diversión y no todas fueron divertidas (algunas, hasta agresivas psicológicamente). Volví a la Universidad a los 30, sigo con propósitos de Doctorado y Honoris Causa aunque sea a los 90 o 110 años, y leo, pero también pienso mucho. Aprendí a tirar las cartas de tarot aunque las he tirado y nunca tuve esa esquizofrenia de creerlo todo, yoga y muchas...

 Llegué a los 40 años soltera.  No era una desgracia, porque peor hubiese sido un matrimonio forzado, un pacto familiar con alguien no de mi gusto o la infelicidad por ser como el resto. Como había tenido relaciones amorosas y sexuales, no era un fracaso, aunque para algunos, lamentablemente, sí.  Pero tener una boda e hijos con el no elegido, para mí era peor que seguir sola. Además, habían aumentado el número de casos de violencia de género y doméstica, y muchos hombres habían cambiado sus ideas, comportamiento y educación desarrollando unas ideas bastante insanas de someter a la mujer en demasiados aspectos, algo así como "esclavizarlos" o someterlas y no precisamente de forma divertida como se educaba en el área sexual de pareja en algunos libros de relaciones amorosas y sexuales, de forma sana, y manteniendo una relación de igualdad y comunicación, expresión y aceptación de las personas cada una con su forma de ser, sino justamente, en el mal modo. A veces le veo. Ni...